Lo que necesitas saber
- El COVID-19 sigue siendo un riesgo, especialmente para los ancianos, las personas inmunodeprimidas y quienes no están al día con sus vacunas.
- Recibir una dosis de refuerzo actualizada contra el COVID-19 es crucial para mantenerse protegido este invierno.
- Las precauciones, como el uso de mascarillas y la realización de pruebas periódicas, siguen siendo importantes, sobre todo porque hay menos medidas de prevención contra el COVID-19.
El presidente Joe Biden dijo el domingo en una entrevista en 60 Minutes que “la pandemia ha terminado”.
“Todavía tenemos un problema con el COVID, todavía seguimos trabajando en ello”, dijo. “Pero la pandemia ya acabó. Si te das cuenta, nadie está usando mascarillas. Todo el mundo parece estar bien, entonces creo que está cambiando”.
Las vacunas y los tratamientos han reducido la gravedad del virus significativamente. Las muertes por COVID-19 a nivel global han llegado a los niveles más bajos desde marzo del 2020. Pero el COVID-19 sigue causando cientos de muertes cada día en EE.UU., y no sabemos todavía cómo nuestros sistemas inmunitarios enfrentarán cualquier nueva variante que el invierno pueda traer.
¿Ha terminado la pandemia?
Muchas personas y organizaciones en los Estados Unidos están actuando como si la pandemia estuviera llegando a su fin. Las mascarillas ya no son requeridas en muchos lugares. Las cuarentenas ya no son recomendadas. Los periodos de aislamiento se han reducido a la mitad. Los estudiantes están volviendo a las escuelas y los empleados a las oficinas. Las vacunas y los tratamientos han reducido significativamente el riesgo de enfermedad grave y muerte.
Aunque la sociedad ha vuelto a algo parecido a la normalidad, el virus todavía tiene una relativamente alta carga de enfermedad, especialmente para los ancianos, las personas inmunodeprimidas y quienes no están al día con sus vacunas. Mientras se acerca el invierno y surgen nuevas variantes, todavía es probable que el país enfrente otro aumento de casos en los próximos meses.
¿El COVID-19 ya es como la gripe?
El COVID-19 sigue matando un promedio de 400 personas cada día. Si las muertes continúan a este ritmo, la cifra anual de fallecidos será de 146,000. Una temporada fuerte de gripe mata a unas 52,000 personas.
Existe un debate sobre cómo se contabilizan las muertes por COVID-19 y cómo se compara el riesgo del COVID-19 con el de la gripe ahora que la mayoría de la población está protegida por una infección previa o por la vacunación. Pero el COVID-19 y sus síntomas potencialmente duraderos siguen siendo imprevisibles y no sabemos qué nos depara este invierno.
¿Qué debemos esperar en los próximos meses?
La subvariante de ómicron BA.5 sigue siendo la dominante en los Estados Unidos, pero la BA.4.6 está empezando a ganar terreno y puede ser la razón por la que los niveles del virus de COVID-19 en las aguas residuales han aumentado en el Noreste. Todavía está por verse si eso se traduce en un aumento de los casos, aunque la BA.4.6 no presenta mutaciones significativas para una evasión inmunológica.
En otras partes del mundo, algunas otras variantes están ganando atención, incluyendo la BJ.1, BA.2.3 y BA.2.75.2, cada una de las cuales tiene mutaciones que podrían evadir la respuesta inmunitaria. Si esto resulta cierto, una de ellas podría provocar una ola invernal. Sin embargo, en la actualidad no hay datos suficientes para hacer predicciones claras.
“Para mí, este invierno va a ser la prueba verdadera de si todavía estamos en una fase de ‘emergencia’, al menos si la definimos por número de muertes, hospitalizaciones y capacidad de asistencia sanitaria (en lugar de por infección o por COVID persistente)”, la epidemióloga Katelyn Jetelina, escribió en su boletín de esta semana.
¿Qué puedes hacer para mantenerte seguro?
Ahora tenemos las dosis de refuerzo actualizadas contra el COVID-19, que son vacunas bivalentes que incluyen componentes tanto del virus COVID-19 original como de las subvariantes ómicron BA.4 y BA.5. Se espera que estas dosis ofrecen inmunidad más a largo plazo y una protección más amplia contra de futuras variantes. Su naturaleza bivalente permite que protejan de futuras cepas de ómicron y también nuevas mutaciones que podrían surgir del virus original, como otra variante delta. Obtener una dosis de refuerzo va a ser crucial para mantenerse seguro este invierno.
Además de estar al día con las vacunas, las mismas precauciones contra el COVID-19 que se usaban al principio de la pandemia siguen siendo válidas y se podría decir que ahora son más importantes, ya que la responsabilidad de la reducción del riesgo ha pasado de las instituciones a los individuos. Utiliza mascarillas de alta calidad y bien ajustadas en espacios públicos cerrados y si la transmisión comunitaria está aumentando en su zona. Hazte la prueba con regularidad y al menos dos veces con 48 horas de diferencia para evitar obtener un falso negativo. Prepárate para la posibilidad de que se infecte y conoce tus opciones de tratamiento.
“Nunca hemos estado en mejor posición para poner fin a la pandemia”, dijo el director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS) Tedros Adhanom Ghebreyesus en una rueda de prensa la semana pasada. “Todavía no hemos llegado, pero ya se vislumbra el final. Una maratonista no se detiene al divisar la línea de meta. Más bien aprieta el paso, con toda la energía que le queda…Pero ahora es el peor momento para ralentizar la marcha”.